Dos
corazones que se alejaban hacia el precipicio,
Sin
medir el dolor de cada uno al evitar abrazarnos,
Pero
el destino no se equivoca al elegir a su
felicidad,
Amarnos
es el camino que debería unirnos al destino para los dos.
Amarnos…
un destino que experimentamos tú y yo,
Dos
cuerpos incos de la separación hacia el infinito,
Luchando
por huir del calor humano emanado del interior,
Pero
ya el destino está escrito para los dos, juntos a la eternidad,
la
unión de los dos, pase lo que pase… y aquí estamos para soñar.
Tú…
un mundo distante de mi anhelo existencial,
Yo…
un cosmos por aceptarlo, por no comprender lo real,
Ambos…
un solo destino en la búsqueda de la verdad,
Nuestro
propósito de vida será amar la
diferencia.
Almas
gemelas que piensan en cosas diferentes,
Vaciedades
de la mente que alejan el camino uno del otro,
Sentimientos
que unen un vivir en el espacio y el tiempo,
Destinos
que se encuentran en el interior de la razón.
Horizontes
diferenciados por caminos errados,
Donde
la luz brilla para cada uno en lo más lejano de la noche,
Sueños
que se complementan por en el amor propio,
Destino
que no sabía el uno para el otro pero aquí esta
Destino
que se está escribiendo al pie de letra,
Por
personas que no se conocían en lo particular,
Ahora
solo toca dejarse llevar por lo que el destino quiere,
Amar
a quien se alejaba en la ruta rotativa de la vida,
Al
final volviste… porque el destino nos encerró en el círculo del amor.
Dos
seres nacientes de la naturaleza, distintos en su esencia,
Arrojados
en la contrariedad del encuentro personal,
al
tiempo son jalonados por el destino de lo irracional,
gracias
al destino por darnos la oportunidad de amarnos de verdad.