Fue
toda penumbra de la conciencia de amarnos,
Pero
dos cuerpos desnudos dieron el inicio de la pasión.
En
la oscuridad en que resplandece el deseo y los besos.
Aquella
noche fue la luz que despuntó en el corazón.
Aquella
noche es el único espacio del desfogue,
De
una piel que atrae tus caricias y tu calor,
Fue
la primera de las múltiples formas de amarte,
En
esa noche todas las energías fueron tuyas.
Fue
de la tristeza una inmensa alegría,
La
felicidad del corazón comenzó sin la luz,
Esa
noche no se compara con el día, tú brillas,
Tu
sonrisa resplandeció en la habitación.
Es
una entre muchas en las que la luna fue el faro,
Brilló
en el alba cuando la pasión grito al viento que te amo,
Noche
aquella inolvidable por tus caricias frecuentes,
Extraño
esa primera noche junto a tu mirada coqueta.
Hay
de aquella noche si no se volviera a repetir,
El
final del destino está marcada en tu interior,
En
el corazón que guarda mis sentimiento fuerte,
Noche
funeste del dolor y el olvido, vivió la esperanza de amar.
Noche…
noche, tenebrosa por la ceguera visual,
Ahora
no te veo junto a mí pero sé que ahí estas,
Noche…noche,
espacio del alma para amar en silencio,
Eres
de nuestro amor el testigo de la verdad… te amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario