Naturaleza
infinita del alma mater antioqueño,
Guardas
en tu interior el potencial de vida, para la humanidad,
Tu
esencia brillara para los hijos, que de tu vientre nacen,
Eras
la divinidad silenciosa, tu quietud te llevo a ser ignorada.
Ya
eres fuente inagotable, que de la vida serás guía,
La
ceguera ha desaparecido por tu energía existencial,
Las
sombras y las tinieblas se convirtieron en esperanza,
Hoy
disfrutamos de tu vocación por el progreso de la región.
Tesoro
encarnado en la montaña viviente de soledad,
Como
las arterias, conectadas al corazón generas ritmo existencial,
Existes
porque te han pensado en tu mayor potencial
¡buena energía!
Ya
no eres desierto de muerte, eres presencia de lo natural.
Manantial
inagotable del arge de un futuro mejor,
comienza un presente con más oportunidades y
sin incertidumbres,
rio
de turbulencias en la profundidad, motor inmóvil en la exterioridad,
color
a región montañera y olor a café, es tu
personalidad.
Vientre
maternal de vida, esculpido en la lejanía del horizonte,
Donde
tus pechos amamantan con miel y leche a los campesinos,
Ituango,
San Andrés, Toledo, tienen el corazón de tu amor,
Los
demás, poseen tus derivados, como potencia de tus atributos.
La
flora reverdea sin cesar con tus componentes nutricionales,
Arboles
de colores extravagantes, beben de tu alma el sabor,
Y
la fauna crece, en el devenir de la existencia dominante,
Para
todos ellos eres abrigo eterno en las noches que hizo frio.
Oh
pacha mama, del norte paisano, riqueza imperecedera,
Del
pasado eras ancestros, construidos en barro,
Ahora
tienes una nueva cubierta metálica incorruptible,
Existes, porque, no te quieres extinguir, ya tienes precencia entre nosotros..
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