domingo, 9 de junio de 2013

MALDITO IMBÉCIL.

Maldito imbécil que cerró las puertas,
Sin dejar tregua en tu corazón,
Y ahora lloras sin medida ni razón.

Quizás no supieron regar el campo,
Con carisias, besos y abrazos,
En este momento tu vida está atada con fuerte tesón.

Maldito imbécil que opaca tu sonrisa,
Con nubes grises en tu horizonte,
Mira tus ojos lloran como fuentes,
Pero tu espíritu fuerte va muy de prisa.

Maldito imbécil que dejo dolor,
Y ya no puedo vendar heridas,
Que en tu vida por amor son sufridas,
Opacando de tu rostro el dulce color.

Imbécil el hombre que mancho tu alma,
Con promesas de innovación amar,
Sin saber cómo pueda el dolor calmar,
Y con mi presencia el mar llegue a su calma.

Imbécil quien no valoro lo que en ti encontró,
Destrozo el deseo de fertilidad,
Y ya tu vida, a mi también destruyó,
Solo para encontrar su propia felicidad.

Maldito imbécil que destruyes la vida,
De la mujer que sufre en su vientre,
Sin predestinar lo que guardas en tu mente.

Maldito imbécil que con tu actitud,
Truncas futuro y no dejas vivir el presente,
Y siembras violencia que brota de la mente.

Imbécil eres tú por permitir que el odio,
Rompa dones y virtudes
Que en ti mujer se encontró,
Ellas nos enseñan el amor en grandes magnitudes

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